Hace unos días mi sobrinita Alba me dijo: "Tía he ido a la pelu y me han pintado las uñas y los labios de un color muy flojito para que no se note" y yo pensé que ya era hora que alguien le regalara unas pinturas chulas para mayores
Me vino al pelo, porque estaba preparando el viaje a Barcelona al bautizo de su hermanito y quería tener un detalle con ella. Así que me decidí por comprar un kit de maquillaje de las Monster High, que se que le encantan (el kit me gusta hasta para mi)
Además, como os podéis imaginar ahora que estoy lanzada a las creaciones reposteras, mi familia me preguntaba si llevaría algún dulce al bautizo... y yo pensaba que no era buena idea porque tras 700 km ¡no me fiaba de cómo pudiera llegar ni un cupcake!
Alba, con sus 7 añitos, me dijo también: "Tía cuando vaya a Madrid vas a hacer algún dulce rico para mí??" y fué cuando pensé que quizá unas galletitas sí que podía llevar a Barcelona... así que me puse manos a la obra: decidí que iba a hacer unas galletas sobre las Monster.
Pero claro, no me veía capaz para hacer a su favorita: Draculaura, mi sobri se tendría que conformar con algo un poco más sencillo: la calavera de las Monster High. De esta forma empezaba la operación galletas Monster High.
Lo primero que tenía que hacer es buscar un cortador de galletas con la forma de la calavera: No lo encontré, la reciente fiesta Halloween había agotado todas las existencias.
Esto de las galletas no iba a ser nada fácil, pensé yo. Pero yo no podía ir a Barcelona sin mi calavera, así que pensé un plan B e improvisé una calavera con dos cortadores distintos: un cortador de Frankestein y un cortador circular.
Y así es como lo conseguí: marcando primero con el cortador de Frankestein y después dando tres cortes adicionales con el cortador circular en la parte inferior de la figura. De esta forma logré simular la forma de la calavera:
Para decorar necesitaba fondant blanco, negro y rosa. Pero como solo tenía blanco, para conseguir el negro y rosa tuve que usar colorante en gel y teñir el fondant (así que ya os podéis imaginar como se quedaron mis manos, más negras que el tizón ;-)
Después tocaba dar la forma con el fondant para hacer lazo, la nariz y los ojos. Sin duda, lo que más me preocupaba eran los ojos. Tuve que hacerlos primero en una plantilla de cartón y usar esta plantilla como guía para recortar muy despacito el fondant con la forma de ojos y pestañas. Tenía razón... ¡qué difícil fueron los ojitos!
Por último, ya solo me quedaba unir todas las piezas en una sola para conseguir la calavera final:
Me vino al pelo, porque estaba preparando el viaje a Barcelona al bautizo de su hermanito y quería tener un detalle con ella. Así que me decidí por comprar un kit de maquillaje de las Monster High, que se que le encantan (el kit me gusta hasta para mi)
Además, como os podéis imaginar ahora que estoy lanzada a las creaciones reposteras, mi familia me preguntaba si llevaría algún dulce al bautizo... y yo pensaba que no era buena idea porque tras 700 km ¡no me fiaba de cómo pudiera llegar ni un cupcake!
Alba, con sus 7 añitos, me dijo también: "Tía cuando vaya a Madrid vas a hacer algún dulce rico para mí??" y fué cuando pensé que quizá unas galletitas sí que podía llevar a Barcelona... así que me puse manos a la obra: decidí que iba a hacer unas galletas sobre las Monster.
Pero claro, no me veía capaz para hacer a su favorita: Draculaura, mi sobri se tendría que conformar con algo un poco más sencillo: la calavera de las Monster High. De esta forma empezaba la operación galletas Monster High.
Lo primero que tenía que hacer es buscar un cortador de galletas con la forma de la calavera: No lo encontré, la reciente fiesta Halloween había agotado todas las existencias.
Esto de las galletas no iba a ser nada fácil, pensé yo. Pero yo no podía ir a Barcelona sin mi calavera, así que pensé un plan B e improvisé una calavera con dos cortadores distintos: un cortador de Frankestein y un cortador circular.
Y así es como lo conseguí: marcando primero con el cortador de Frankestein y después dando tres cortes adicionales con el cortador circular en la parte inferior de la figura. De esta forma logré simular la forma de la calavera:
Para decorar necesitaba fondant blanco, negro y rosa. Pero como solo tenía blanco, para conseguir el negro y rosa tuve que usar colorante en gel y teñir el fondant (así que ya os podéis imaginar como se quedaron mis manos, más negras que el tizón ;-)
Después tocaba dar la forma con el fondant para hacer lazo, la nariz y los ojos. Sin duda, lo que más me preocupaba eran los ojos. Tuve que hacerlos primero en una plantilla de cartón y usar esta plantilla como guía para recortar muy despacito el fondant con la forma de ojos y pestañas. Tenía razón... ¡qué difícil fueron los ojitos!
Por último, ya solo me quedaba unir todas las piezas en una sola para conseguir la calavera final:
¡Qué contenta se va a poner Alba!
¡Las Monster High ya van camino de Barcelona!